Sun God Replica: "Grandular Fever" (Spooky Records / Beast Rd)


Texto: Txema Mañeru.

¡Vaya guapa mierda australiana! Como no los he descubierto hasta este flamante y colorido tercer disco, para mí a la tercera ha dio la vencida. Sun God Replica llaman la atención con su hard-rock psicodélico cargado de glam, brillantina y con melodías pop. Y lo hacen desde la colorista y psicodélica portada de “Grandular Fever” (Spooky Records) que parece un claro homenaje al Jimi Hendrix más alucinado.

Y esto es buena mandanga porque la frente tenemos monstruos consagrados de la siempre interesante y potente escena australiana. Al frente el hombre de The Meanies, Lindsay McLennan. También estuvo con Bakelite Age de donde llega Lochie Cavigan. En el bajo Tim Pickering de los Monochromes. Por si fuera poco se encarga de la producción el ubicuo Loki Lockwood (The Drones y mil aventuras más). El sonido resultante viaja desde Hendrix a las Ronettes. Desde David Bowie, Slade y T-Rex hasta Deep Purple y Black Sabbath. Desde los Pink Floyd de Syd Barrett y los Seeds hasta Cream o los Beatles más alucinados y rockeros.

Pero todo esto no se queda en ese cúmulo de influencias ni en esa imagen apabullante. Está muy bien condimentado con un puñado de excelentes canciones muy explosivas a menudo. Ya desde el arranque imponente con ‘Blow your mind’ te vuelan la mente con su hard-rock cargado de melodía y con vitriólica guitarra. ‘Watch and destroy’ es un pepinazo duro en toda regla pero tiene unos coros deliciosos y una parte melódica central que te engancha yun final que homenajea, sí, al ‘Search and destroy’ de los Stooges. En ‘Celestial building block’ es Syd Barrett quien parece entrar en el edificio, así como en el arranque de ‘Rock and a stone’ que luego tira hacia los Crazy Horse de Neil Young y con algún destello stoner también. ‘Jesus got talent’ es otra fuerza de la naturaleza entre los Cream, Hendrix y los Kyuss con un riff de guitarra circular fulgurante, pero una voz y arrebatos melódicos. En ‘Masters of the sea’ navegan a toda velocidad antes de despedirse con puro rock duro en un ‘Evolution’s waiting’ que tiene también un estribillo guapo de aromas glam y un espectacular solo de guitarra para viajar desde tu sillón favorito. ¡Mucho más que colorido e imagen!

Sería una pasada que giraran pronto por aquí. Además ya tengo la banda ideal para acompañarles. Serían sus paisanos de Datura4, con Dom Mariani al frente, que con “Hairy Mountain” y antes con “Demon Blues”, han demostrado ser también una de las mejores y más originales propuestas de hard-rock con melodías y corazón de pop. ¿Quién se apunta?

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