Texto: Carlos Molina.
Un cuarto de siglo de vida acaba de cumplir el sello barcelonés BCore. Una efeméride que celebrará por todo lo alto esta semana con una serie de bolos muy especiales en las salas Sidecar, Apolo y Musichall que se cerrarán seguro que con soldout. Aprovechamos este aniversario para charlar con el creador y máximo responsable de la discográfica, Jordi Llansamá.
25 años. Ahí es nada. En primer lugar, nuestras más sinceras felicitaciones. ¿Cuáles son los primeros sentimientos, y sensaciones, que le vienen a uno cuando echa la mirada atrás y contempla todo el camino transitado hasta ahora?
La primera sensación es la de que el tiempo vuela. Y que esto va en serio, que te haces mayor y que no tiene vuelta atrás. La segunda es de satisfacción de ver el trabajo hecho. Y las ganas aprovechar la estabilidad que te dan 25 años de carrera para no caer en el tedio de editar discos mecánicamente y buscar la excitación en la búsqueda de nuevas bandas y nuevas fórmulas de renovarse.
Camino en el que habrá habido a buen seguro numerosas trabas y también satisfacciones. Comencemos por lo primero para terminar por lo más grato. ¿Cuáles crees que han sido los momentos más duros vividos en estos 25 años?
Yo no tengo la sensación de que haya vivido momentos duros. Pero sí que cuando se desintegran las escenas y hay cambios generacionales, toda una serie de bandas en las que has invertido esfuerzos y trabajado desaparecen y con ellas todos sus seguidores, así que tienes que volver a empezar de cero y levantar nuevos proyectos. La cosa se pone bastante cuesta arriba.
¿Y los momentos y logros qué más alegría os han aportado?
Cada vez que hemos ido cumpliendo etapas: los primeros 10 años, los 15, los 20, y ahora los 25. Puede que uno de los momentos más excitantes fuera cuando fuimos capaces de concentrar en el sello bandas con mucha identidad: Aina, The Unfinished Sympathy, Standstill, Delorean, Tokyo Sex Destruction. O el momento actual con Nueva Vulcano, Betunizerm, etc. Fíjate que las cosas cogen algo de peso cuando estás trabajando con bandas que son capaces de aguantar varios años juntos y editar al menos tres álbumes.
¿Cuántas personas impulsaron el nacimiento del sello, y cuántas trabajan actualmente en él?
Al principio estaba yo solo. Y durante bastantes años fue así. Luego estaba Albert, que siempre ha llevado todo el tema del mailorder. Y más tarde creamos la figura de la promoción, que no se ha incorporado hasta hace unos años. Imagínate que manera más punk o diy de funcionar. Ahora mismo somos 5 personas contándome a mí.
¿Qué crees que ha hecho a BCore diferente respecto a otros sellos en este último cuarto de siglo? ¿Cuál consideras que es el leitmotiv del sello?
Posiblemente ir a nuestra puta bola y no encajar en ningún lado. Demasiado punk o ruidosos para el circuito pop y poco rock urbano, clásico o rock diferente para el circuito rock. Puede que nuestro leitmotiv sea la proximidad. Mi trato con la gente de los grupos es directo. Todavía hoy me cuesta un montón delegar cualquier faceta del sello. Muchas veces es tan fácil como cogerle el teléfono a la gente cuando te llama o contestar los emails.
Mirando a otros compañeros de fatigas, ¿qué otras discográficas españolas valoras por su proyección y trabajo? ¿Hay algún sello a nivel internacional que haya sido en ocasiones un espejo en el que hayáis querido miraros a la hora de trabajar?
Pues claramente valoro mucho la actividad de Munster. Sobretodo su trabajo con las reediciones en este país donde no se valora para nada lo propio. Se necesita gente que reivindique lo que aquí se hizo en los 60 y los 70. Tenemos la puta tendencia de sólo valorar lo que viene de fuera. Y aquí ha habido talento, tanto en lo artístico, como productores, arreglistas, etc, como para parar un tren y tener un sonido propio. A nivel internacional siempre nos miramos en el espejo de Dischord. Sobretodo porque fuimos fans de las primeras ediciones del sello y porque después hemos tenido el privilegio de trabajar juntos distribuyendo sus discos aquí.
¿Hay alguna banda (que se pueda confesar) que siempre hayáis querido fichar, pero no ha podido ser?
Posiblemente la única banda que en aquella época me hubiera gustado tener en el sello era A Room with a View. Pero nunca acabo de cuajar. Ellos era muy suyos y eso aún los hace más interesantes.
¿Qué grupos de los que han pasado por BCore te han sorprendido más por su crecimiento y el status alcanzado? ¿Y cuáles crees que deberían ser más reivindicados y seguidos?
Pues los que más han tenido continuidad después del paso por la casa son Standstill o Delorean. Standstill era un grupo con una intensidad incontrolable. Y les he visto trabajar duro hasta conseguir controlar el sonido. Al principio era un grupo muy bueno, pero caótico y era dificilísimo que sonaran bien en directo. Hasta que encontraron la llave para canalizar esa energía y encontrar su sonido. Podría pasar lo mismo con Nueva Vulcano.
Fuera de BCore, ¿cuáles son los últimos discos que más te han fascinado?
Cosas como Biznaga, Antiguo Régimen o Futuro Terror.
También has hecho tus pinitos literarios. Si escribieras un libro que repasara este primer cuarto de siglo de vida de BCore, ¿qué título le pondrías?
Harina de otro costal…
¿Cuáles son los proyectos futuros a corto plazo que os marcáis con el sello?
Estamos trabajando ya en los lanzamientos de septiembre. Saldremos con Greus, Vlack y Cuello. Y seguiremos con los nuevos trabajos de Betunizer y Alberto Montero.
Vais a celebrar esta efeméride con un buen número de (grandes) conciertos. ¿Qué destacarías de los mismos?
La reunión puntual de The Unfinished Sympathy para el evento. Y la disposición de Standstill para tocar los álbumes que editamos cantados en inglés. Cosa que les agradezco a los dos.
Comentarios