20 discos a descubrir de este 2014 (3)

Texto: Carlos Molina.

Un día más, continuamos acercándoos aquellos discos independientes o underground que más nos han llenado durante 2014. Hoy: Tori Sparks, Lucas Masciano, Alis y Hellbilly Club.


Tori Sparks. “El Mar” (Glass Mountain Records)


Vaya nuestro más sincero “olé” por la arriesgada propuesta que la artista norteamericana afincada en Barcelona se ha currado de cara a su quinto disco. Se trata de un compendio entre temas nuevos, algunas de sus mejores piezas hasta el momento y un buen número de radiantes versiones -‘Everybody knows’ (Leonard Cohen), ‘La Flor de Estambul’ (Javier Rubial/Erik Satie), ‘Verde’ (del maestro Heredia), ‘Llorando (Crying) de Roy Orbison y ‘Quizás, quizás, quizás’ de Oswaldo Farrés-, todo ello sacado hacia delante junto a Calamento, veterano trío de flamenco. Folk americano, jazz y flamenco construyen un disco delicioso de principio a fin. “La idea era llegar a un punto en común entre la música nueva y antigua, música mía y la de otros artistas, que respeto, en mi idioma maternal (inglés) y el idioma de mi día a día (español), que juntaran las influencias de siempre y mi vida en España. Así sería en parte algo conocido y en parte algo extraño para casi cualquier persona que lo escucha; y representaría muy bien, creo yo, el momento en que me encontraba como persona y como artista en el momento de sacar el álbum”.

Ver entrevista con Tori Sparks.


Lucas Masciano. “De París a Transilvania” (Autoeditado)

Ayer hablábamos del primer disco en solitario de Xebi SF concebido de un modo itinerante. Ese espíritu de viajar (en este caso, a lo largo y ancho del Viejo Continente) y registrar a la vez un álbum ha sido también el elegido por el argentino residente en la ciudad condal Lucas Masciano. Folk, pop-rock, pasajes fronterizos y jazzísticos y canciones etéreas se ponen al servicio de un disco grande, muy grande, en el que han tenido cabida artistas callejeros, alumnos de conservatorios y concertistas. “Es un álbum cercano, compuesto y grabado sin presión. Te susurra al oído un puñado de canciones que te suenan de algo”.

Ver entrevista con Lucas Masciano.


Alis. “Recopilación de Excesos Emocionales” (Warner Music)

¿Injusticias musicales en este país? Uno de los primeros casos a señalar, a buen seguro, sería el de Alis. Este artista andaluz tiene una carrera musical por la que mendigaría más de uno, y dos, músicos de pop-rock de esos que entran en lo alto de la lista de Promusicae. A falta de recibir un mayor reconocimiento del público, sigue regalándonos gemas musicales como esta “Recopilación de Excesos Emocionales”, un disco doble con revisiones de sus mejores temas hasta ahora junto a un buen número de invitados, y un total de 8 crudos cortes inéditos. “Son quizá los temas más representativos de mi carrera, interpretados junto con compañeros, grandes artistas que les dan su toque personal. Luego está el CD 2 con temas inéditos, canciones que necesitaba expulsar desde dentro, cual niña del exorcista con sus peores vómitos. Lo del punto y aparte es lo más cercano a lo que pensé en un principio, pero todo cambia el planteamiento inicial si además hay una separación familiar de por medio. Todo cambia en tiempos de entrega, en concepto y en la manera de querer expresarte y querer defender ese material. Con esta distribución de los temas quedé conforme y ahora los llevo a escena con energía”.

Ver entrevista con Alis.


Hellbilly Club. “Subhumanos” (autoeditado)

La banda catalana roza los veinte años de carrera. Su séptimo disco los sitúa como uno de los grandes nombres nacionales influenciados por el rockabilly y psychobilly, abriendo su sonido también al punk y al pop. Como afirman, "tenemos influencias del rockabilly y psychobilly, pero también del punk, new wave y rock. Nos gusta todo tipo de cosas. Desde Gene Vincent a Depeche Mode". Fogueados también en formaciones como Los Rebeldes, Gatos Locos, Atomic Leopards, The Quakes, Tim Polecat o Sigue Sigue Sputnik, con Subhumanos firman un (nuevo) disco fresco y directo. “Tenemos el sonido que realmente buscábamos. A mi modo de ver, muchas bandas de estilos de psychobilly y punkbilly dan mucha cancha al slap del contrabajo muy marcado, la velocidad de los temas y la voz agresiva y tal…Cosa que está muy bien, pero que no es lo que queríamos. Nos gustan los bombos a cada tiempo y muy alto (cada vez más), medio tiempos, estamos incorporando muchos coros a los temas, y jugamos mucho con el eco y los acoples de guitarra…”, señala Santi Lluch.

Ver entrevista con HellBilly Club.

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