Hiverland, el regreso del gran metal


El metal, como cualquier género musical, muta, se multiplica y varía, generando nuevos sonidos y nuevas propuestas, algunas acertadas, otras no tanto. Entre las que sobresalen en el nuevo hevay patrio tenemos que destacar la de Hiverland, combo guipuzcoano que factura un fantástico metal germano, en la onda de Helloween o Edguy. Hablamos con su poderoso vocalista, Arkaitz, del origen, presente y futuro de este grupo, con sobresaliente LP en la calle, "The Return".

Antes de ir con “The Return”, ¿quiénes componéis el grupo, en qué bandas habéis militado anteriormente y qué os llevó a crear este proyecto?
Bueno, principalmente fui yo quien tuvo la idea que daría como resultado este proyecto, ayudado por Josu Montes, que aportó sus ritmos a la batería en la demo ‘Wings in Flames’ y el EP ‘Need for Survive’ previo a ‘The Return…’. A lo largo de estos años la formación ha ido variando y estos cambios han dado como resultado una banda vertebrada en base a un objetivo común.
Nuestro bajista, Aritz, provenía de una banda en cuyo estilo no encajaba del todo y tras encontrar nuestro anuncio se dio cuenta de qué era lo que buscaba. No dudó en hacer todo lo posible por entrar, ¡incluso mintiendo sobre su edad pensando que le ayudaría a entrar! Imagina la sorpresa cuando nos lo contó de improviso en un ensayo: nos quedamos alucinados.
Unai y Pablo se conocían de antes porque habían compartido muchos grupos haciendo versiones que dio como resultado Insomnia, en el que empezaron a componer temas propios, pero que se disolvió unos meses más tarde. Habían compartido grupo con Gary, guitarrista en la etapa fronteriza entre ‘Wings In Flames’ y ‘Need for Survive’, que fue quien propuso a Unai como el nuevo fichaje. A primera vista, durante las pruebas, nos sorprendió su edad, pero la rapidez con que aprendió los temas y su técnica fueron decisivas a la hora de elegirlo.
Tras la partida de Gary, Unai propuso a Pablo como segundo guitarrista y, debido a su inseguridad inicial, tuvimos que convencerle más de tres veces para que hiciera la prueba y finalmente entró justo a la salida del primer LP : ‘The Return…’
Bjorn proviene de una banda que tubo mucha repercusión en Guipúzcoa, Azken Garrasia, y actualmente milita en varias bandas como Quaoar, y otras como músico de estudio. Hizo que las baterías de ‘The Return…’ fueran posibles aportando su paleta de ritmos y convirtiendo así el LP en un disco rico en matices.

“The Return” os consolida, a mi juicio, como uno de los nombres a seguir en el metal nacional. Se trata de un disco autoproducido que comenzáis a grabar en 2008, y que ha visto la luz hace algo más de medio año. ¿Ha sido un trabajo de gestación difícil?
De antemano, ¡Gracias por el cumplido! (risas). Respecto al disco, más que difícil ha sido un largo camino, y hay que tener en cuenta que aparecen temas en el disco que tienen más de seis años y otros que cuentan sólo con dos.
Hasta que no se ha estabilizado la formación no hemos podido presentar nuestro trabajo, por lo que decidimos grabar esos temas ya que, de alguna forma representan, una parte muy importante del pasado de la banda y, como solemos decir:" 'The Return…’ es la biografia cantada de Hiverland".
Creo que, en resumen, teníamos ganas de poner punto y final a esta etapa del retorno que creó algo de expectación en San Sebastián, iniciándose así esta nueva etapa.
¿Qué podéis contarnos de vuestros trabajos previos, el EP “Need for Survive” (2008) y “Wings in Flames” (2002)?
Cristalizan una época y un estilo concreto que hemos superado y que tendrá como resultado final un estilo más personal.
Practicáis un power metal germano, y despuntáis ya desde la intro Drums of War, alcanzando cotas magistrales en Tears on my Grave, hermoso pasaje de retazos melódicos, o la trepidante Need for Survive. ¿Cómo desgranaríais vuestro sonido?
Escuchando el disco son inevitables símiles con bandas como Helloween o algo más “actual” como Edguy, pero también hay mucho de Iron Maiden en punteos a dos guitarras y en la línea vocal, que pretende un juego entre tonos medios y agudos, sin exceder en estos últimos.
La intención de Hiverland no es copiar, sino revisar esas influencias creando una música que agarre a los más puristas pero entre en sintonía con lo más actual del estilo.

El álbum lleva ya varios meses en la calle. ¿Estáis satisfechos de su repercusión crítica y de ventas?
A decir verdad la mayoría de las criticas que estamos recibiendo son favorables e incluso a veces se nos llega a comparar con grupos tan magistrales como Helloween, lo que es un verdadero halago y nos invita a evolucionar cada día un poquito más.
Respecto a lo que comentas de las ventas, tal y como está la cosa hoy nos va bastante bien, porque nos están escuchando en Japón, y las tiendas digitales como Itunes, Amazon, Napster, etc… ayudan mucho a la difusión de nuestra música.

Un disco en el que colaboran Jon (Krait), Igor (Aesir) y Moisés (Krait, Mandrágora Negra). ¿Qué pensáis que han aportado al álbum?
Sus colaboraciones se pueden oír en el último tema del disco, Dark Angel, que narra ese caminar del ángel de alas blancas de la portada de ‘Wings In Flames’, que pierde la inocencia mientras se tiñen sus alas por los reveses de la vida que dan fruto a un camino más creativo, desechando su pasado y resurgiendo hacia una nueva meta.
Se podría decir que cada uno de ellos representa a un personaje en este resurgir, aportando al tema una visión externa de su camino, dándole un toque mas variado a lo largo del tema.

Del mismo modo, la grabación ha corrido a cargo de Carlos Díaz. ¿Cómo ha sido el trabajo con él, y qué es lo que más valoraríais de su trabajo?
Fue toda una suerte contar con su ayuda, que fue decisiva a la hora de definir la mezcla y que supo ajustarse perfectamente al sonido que buscaba la banda.
Se volcó totalmente y poco a poco hizo que una grabación autoproducida
sonara dignamente, y todo ello en menos de un mes.

El 12 de noviembre actuaréis en la sala Bilborock. ¿Qué podemos esperar de este concierto?
Tenemos muchas ganas de desplegar nuestra artillería pesada en una sala que pudimos disfrutar no hace mucho en compañía de Atland e Hira. Presentaremos dos nuevos temas dentro del reducido set-list al que nos tenemos que ajustar, combinándolo con lo mejor de nuestro actual trabajo “The Return…”.

Habéis tenido la posibilidad de compartir escenario con Avalanch, Dark Moor o Tierra Santa. ¿Cuál de los bolos dados hasta ahora os ha resultado más especial, y por qué?
El que compartimos con Dark Moor. Estuvimos con ellos tocando en Irún, fue algo más especial de lo común porque se pusieron en contacto directo con nosotros, ofreciéndonos la posibilidad de telonearlos. Por aquel entonces todavía estábamos un poco verdes, arrastrando los temas de la demo y eran únicamente 2 ó 3 los temas que se dejaban caer del disco “The Return…”
Más de una vez nos preguntábamos por qué nos elegirían a nosotros entre tantos
grupos que había en Guipúzcoa. Fue un concierto bastante familiar por describirlo
de alguna manera, coincidíamos por el backstage y se respiraba un aire agradable. Tampoco tuvimos problemas a la hora de organizar los directos y se mostraron muy dispuestos en todo momento a ayudarnos en todo lo que ellos pudieran.

Si queréis añadir algo más…
Nos gustaría agradecer a Diabulus In Musica el contar con nosotros en el concierto de presentación de su nuevo disco, son unos excelentes músicos y sobre todo
una gente extraordinaria, y transmitir también nuestro agradecimiento a toda esa gente que facilita que nuestros directos sean posibles.

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