Texto: Edu Gascón
El pasado 15 de marzo se estrenó en primicia y en único pase “El camino más largo”, el documental de Alexis Morante que narra la gira que Bunbury y su banda (Los Santos Inocentes) hicieron por USA allá por 2010.
El documental comienza con el concierto que el artista zaragozano ofreció en el Estadio Azteca de Méjico ante 90000 espectadores. A partir de ahí comienza el camino. Bunbury decidió retroceder años atrás e iniciar un tour inédito (como en los viejos tiempos) alejado de lo que son habitualmente su giras. Lo que parecía un periplo apasionante se convirtió pronto en una apuesta vital del artista en un intento casual de reencontrarse a sí mismo. De ahí la importancia de este documental (o rockumental como lo llama la productora 700 GFilms) en el que en definitiva se muestra el viaje interior del músico maño hacia sus luces y sombras. La figura de los miembros de su banda, su mujer e incluso su gato cobran un protagonismo inusual y hacen de este documento uno de los más importantes a la hora de acercarse a la figura de Enrique Bunbury.
Durante esos dos meses Alexis Morante nos acerca con su cámara a todos los aspectos de la vida de Enrique. No es un documental que refleje una gira al uso sino que es una narración de las experiencias vitales de Bunbury mientras recorre Estados Unidos de Norte a Sur y de Este a Oeste. Un país en el que la popularidad del músico estaba muy lejos de la que puede tener en España o Latinoamérica y donde tuvo que enfrentarse a pequeñas salas o a medio llenar e incluso a problemas con los promotores.
Y es ahí donde reside la clave de “El camino más largo”. Bunbury abandona el conformismo y el confort del éxito cosechado durante treinta años de carrera y decide volver hacia sus orígenes. Buscar experiencias para poder seguir creando y ofrecer a su público su música tan pura y sincera como ha hecho hasta ahora o lo que es lo mismo una apuesta a todo o nada por el Rock & Roll.
Enrique puede gustar o no pero no deja a nadie indiferente. El trabajo realizado por Alexis Morante refleja la importancia que Bunbury da a su música independientemente del lugar en el que esté y al público al que se enfrente. “La música es el camino, no la meta, y cuanto más largo, mejor”, afirma el propio artista durante el documental.
Se puede decir que este trabajo nos es de exclusividad para fans del exlíder de Héroes del Silencio sino que es recomendable para cualquier amante del Rock. Un reflejo de lo que se vive en un backstage , en una caravana o en un autobús. Una imagen alejada del glamour que nos muestra el trabajo (en ocasiones no reconocido), recompensas, reflexiones y sinsabores de una estrella del Rock.
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