Texto: Carlos Molina.
Canteca de Macao regresa a la escena discográfica con un trabajo, “Lugares Comunes”, con el que dan un paso adelante mirando al pasado.
Anita Kuruba y Chiki Lora tienen nuevo disco bajo el brazo, y todo tras haber superado un profundo bache que casi acaba con la carrera del grupo hace un par de años. No ha sido así porque han decidido recuperar lo que dio vida a Canteca de Macao años ha.
“Nos planteamos seriamente dejarlo. Estábamos agotados, y los dos teníamos ganas de hacer nuestros propios proyectos. Además, los últimos álbumes, en realidad, habían sido como varios discos en uno. Estaba mi visión por un lado, la de Ana por otro, y la del resto de la banda, que eran artistas, y no meros músicos de acompañamiento, con sus ideas y deseos. Un auténtico jaleo. Al final decidimos terminar el último disco que teníamos firmado con la compañía y ver qué pasaba. Y de repente, Anita sugirió la manera de superar todo esto: volver a la esencia del grupo, componiendo los dos a guitarra y voz”, asegura Chiki.
Como resultado han facturado un gran disco y han cargado las pilas al máximo. Se les ve ilusionados y muy satisfechos con un trabajo de espíritu minimalista y adornado, no en exceso, por fantásticos retazos sonoros gracias a un estupendo trabajo en la producción a cargo de Rubén García. “Le hemos dejado que cargue las canciones con instrumentos y arreglos”, asegura el guitarrista, centrándose tanto él como Anita en insuflar emotividad y alta carga evocadora a cada una de las canciones. Así, cuando les digo que me da que en esos lugares comunes que cita el título predomina el corazón, porque el álbum tanto en letras como en sonidos parece muy confesional, desnudo, y lleno de sentimientos, Chiki sonríe y señala: “has dado en el clavo”. Y Anita remata: “Todos compartimos un lugar común, que es el amor, con el que vives grandes momentos y otros muy duros. Pero es algo que nos une, independientemente de la edad, dónde vivamos o nuestro sexo”.
“Lugares Comunes” cuenta con un buen puñado de temas hermosos: ‘A punto de estallar’, es un buen ejemplo. Gran presencia vocal, mecida por la guitarra, hasta un estribillo muy evocador y con más fuerza. ‘Sigue Aquí’ o ‘Loca de Atar’ se podrían defender en acústico y la banda debería salir entre vítores. Lo mismo que la sentida ‘La Vida’. Y flipo con ‘Ya no’, de un arranque con concepción minimalista (parece interpretado desde una habitación), pero que va in crescendo y engancha, y mucho. Muy, muy buena, al igual que esa aflamencada y funky ‘Acuérdate’. Canciones alejadas de esa etiqueta de “combo festivo” con el que algunos medios, y público, han reducido la propuesta sonora de Canteca de Macao en los últimos años. “Mira, en nuestros discos más recientes ya había temas como los de ‘Lugares Comunes’ que bebían de un enfoque acústico, más intimista. Parecían perdidos entre los más animados, no se les prestó demasiada atención, Pero ahí estaban, como comprobaron algunos de nuestros seguidores veteranos. De hecho, en los acústicos que hemos hecho en diversas FNAC se nos ha acercado gente que nos ha dicho que esos álbumes ya sugerían que íbamos a terminar componiendo un disco como éste”, revela Chiki.
Llegados a este punto, resulta evidente que Anita y Chiki necesitaban un viraje sonoro, quitarse peso de las mochilas y empezar a componer volviendo a los orígenes. Si esta forma de concebir el disco marcará la composición de sus próximos álbumes está por ver. “Me siento muy contenta por la forma en la que hemos trabajado a la hora de crear ‘Lugares Comunes’, pero no me atrevería a decir cómo será el modo en el que acometeremos otro álbum en el futuro”, apunta Anita. Lo que sí parece claro es que aquel que se quede con una idea preconcebida de Canteca de Macao como grupo pachanguero se perderá a una banda en un gran momento, disfrutando de un presente distinto y con ganas de comerse el futuro. “Me ha pasado muchas veces eso de estar en la calle, comentar por alguna razón que era la cantante de Canteca de Macao y que me pregunten: ¿Sí? Pero tía, ¿qué has hecho con tus rastas?”. “Ser festivo todo el rato puede ser muy cansado”, añade Chiki. “Por eso disfruté tanto en la última gira por Estados Unidos, allí nos recibían sin prejuicios, sin esa etiqueta de grupo para animar a la gente”.
Hablando de giras, nuestros dos protagonistas tienen muchas ganas de subirse al escenario de la sala Galileo Galilei de Madrid este fin de semana para defender por primera vez este nuevo disco. “Los últimos directos en Ciudad Real y Ciempozuelos fueron un poco locura, porque teníamos el nuevo disco ya grabado y a punto de salir y seguíamos con la banda y defendiendo el repertorio anterior, pero ahora estamos con ilusión, y a la vez expectantes por ver cómo va a salir todo y cuál va a ser la respuesta de la gente”, confiesa Anita. Chiki, por su parte, no quiere ver estos dos primeros bolos como un indicador de lo que puede esperar a la banda en cuanto a “repercusión” en los próximos meses. “Cuando terminemos la gira será el momento en el que realmente podamos sacar conclusiones”.
Lo que está clatro es que el enfoque del disco se trasladará al directo. “Estamos delegando mucho en este aspecto en Rubén, prestando mucha atención a cómo debe ser la propuesta sonora del show”, asegura Chiki. Y aunque Anita confiesa que llegaron a plantearse “presentar el disco en formato acústico”, finalmente han apostado por una banda “amplia”, con mucha atención en el repertorio a “Lugares Comunes” pero con espacio para temas de los primerísimos años de Canteca de Macao.
Anita incide en la diferencia entre los conciertos anteriores del grupo y lo que viene ahora. “Tengo la sensación de que hubo un momento en el que llegamos a hacer los conciertos pensando en lo que la gente podía querer recibir. Como si fuera una especie de obligación dar fiesta y hacer que se el público se lo pasara bien como agradecimiento por haber asistido al concierto. En esta ocasión, miramos hacia nosotros, el enfoque va a salir de nuestro interior, como el álbum. Y eso podrá gustar más o menos, pero al menos garantizamos que va a ser un enfoque cargado de sinceridad”.
Sinceridad, y emotividad, como rebosa su último disco. Canteca de Macao han alcanzado su madurez. Se merecen mucha suerte pero, por el momento, nuestro aplauso. Y aquí lo tienen.
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