Texto: Txema Mañeru.
¡No parece que vaya a perder comba Katy Perry con su nuevo disco! No es que innove demasiado ni que arriesgue el todo por el todo, pero ha vuelto a reunir en "Witness" (Capitol / Universal) una buena y heterogénea colección de canciones, con varios hits rompe-pistas, que le mantendrán sin problemas entre las cantantes más populares y comerciales del nuevo milenio. Yo prefiero el riesgo en forma de sencillez y de menso es más de Lorde que con su "Melodrama" acaba de firmar uno de los discos del año y acaba de alcanzar la mayoría de edad en todos los sentidos. Con singles tan buenos y variados como ese eufórico primer tema que es ‘Green light’ o ese perfecto cierre con ‘Perfect places’. También tiene esas joyas de menos es más como la relajada ‘Homemade dynamite’ o la preciosidad total ‘Liability’. Deja bien claro que está para quedarse.
La Perry, sin embargo, sí que está por encima de otras propuestas más jóvenes como la prometedora Halsey que también está armando mucho revuelo con su reválida "Hopeless Fountain Kingdom". En su nuevo disco brillan singles como el sensual y cadencioso baile de '100 Letters' con su pegadizo estribillo. Se quiere acercar a Lorde, por cierto, en la relajada y experimental 'Eyes closed', pero le falta un trecho. Sí que se acerca más en un emocionante lento como 'Sorry' por el que no debe pedir perdón. Esta senda quizás sea la más adecuada para ella. Usa diferentes productores para dar más juego y también cuenta con interesantes colaboraciones como las de Cashmere Cat en el buen cierre con 'Hopeless', la de Quavo y la de Lauren Jauregui, con la buena producción de Greg Kurstin. Pero el pelotazo de este disco de la nominada a los Grammy es ese ‘Now or never’ que combina electrónica y baile con un estribillo de esos que tanto encandilan a la juventud actual. Su debut, “Badlands” entró al puesto número 2 en Billboard, pero es que este nuevo trabajo ha sido directamente número 1 en su salida reciente. ¡Habrá que seguirle la pista!
Pero tampoco conviene dejar de prestar atención a Katy Perry porque con "Witness" vuelve a demostrar porque es una de las artistas más famosas y vendedoras de la última década, sobrepasando ya los 40 millones de discos. Arranca con el mágico y sensual tema titular. Explota con sencillos como 'Swish swish' con el gran dueto de Nicki Minaj y su estribillo y ritmo imparables que recuerdan algo al más popular Michael Jackson. Se pone tierna y cálida en la triste 'Miss you more' y se vuelve a encadenar al ritmo en otro hit como 'Chained to the rhythm', junto a Skip Marley. Con Migos nos entrega otro claro y muy diferentes single como es 'Bon appétit' que está también arrasando con su llamativo videoclip que ha superado los 100 millones de reproducciones en tan solo 18 días. Sigue la producción de Max Martin en bastantes temas pero arriesga dando entrada a muchos nombres de prestigio en el electro-pop como Hot Chip o Sia. Además se muestra más personal y cercana que nunca. Así se desnuda en temas lentos llenos de magia y buenos ambientes como ‘Save as draft’ o el desgarrador final con ‘Into me you see’ que tiene hasta un punto Nick Cave, pero en su opuesta voz. Buenas pruebas de que quiere seguir madurando también. ¡Tan valiente como Lady Gaga y con ganas de seguir dando guerra!
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