Texto: Txema Mañeru.
¡Lo ha vuelto a lograr! James Blake vuelve a firmar uno de los 5 mejores discos del año y si no te lo crees, mira las listas de fin de año. Esta vez, además nos ofrece ración doble. Hasta 17 canciones y 76 minutos para un disco que también aparece ahora en LP doble. Novedades importantes son, en primer lugar, la flamante producción del genio Rick Rubin (Johnny Cash y mil clásicos más). La portada también es una preciosidad absoluta con la firma del ilustrador Quentin Blake, famoso por ilustrar los libros infantiles de Roald Dahl.
Este joven genio de versátil y dúctil voz es el más influyente en la electrónica con alma actual. Estuvo nominado a los Grammy y ha ganado un Brit al Mejor Artista Masculino. Todo el fenómeno musical posterior al dubstep se mueve tras él y colabora con otros artistas de primer nivel. Por ejemplo, en el reciente “Lemonade” de Beyoncé que es su mejor trabajo acogido por la crítica hasta la fecha. También acaba de entregar una versión de ‘Timeless’, uno de los más destacados singles de este disco junto al rapero Vince Staples.
Musical y emocionalmente “The Colour In Anything” (Polydor / Universal) no tiene nada nuevo que no estuviera en “Overgrown”, por ejemplo, aunque Blake dice que este es su trabajo más alegre y colorista. Yo lo escucho una y otra vez y alegre, al menos, no lo parece, pero precioso, de nuevo, sí. El amor y su perdida, la incomunicación y el drama en general vuelve a estar en letras y sonido. Su utilización del piano sigue siendo magistral y su voz, que alterna de los tonos más graves al más emotivo y rompedor de los falsetes, te llega hasta el más profundo interior. Ya desde ‘Radio silence’ se nos muestra con su electrónica orgánica, sensible y minimalista, con buenas cuerdas y con esa voz que le convierte en el Marvin Gaye del siglo XXI y que también y se relaciona a menudo, y con justicia, a las de Antony Hegarty o Bon Iver. Un Bon Iver, por cierto, que pone también su voz en esa perla al desnudo, con el piano y poco más que se titula ‘I need a forest fire’ y es puro soul de hoy en día. En este aspecto resalta también la presencia de otro de los mejores actuales del soul y R&B actuales, Frank Ocean. Esto con el permiso, claro, del compañero de Blake en Polydor / Universal, Michael Kiwanuka que también acaba de entregar otra joya de disco como “Love & Hate” que pelerá con este en lo más alto de las listas con lo más destacado del presente año. Ocean firma un magistral dueto como ‘My willing heart’ también con brillo para el piano y sonando ambos cercanos al Marvin Gaye más emocionante. La última e interesante colaboración la firma Connan Mockasin en ‘Noise above our heads’. Por citas algunos otros de los muchos momentos destacados y emocionantes de un inabracable trabajo, te hablaremos de la sencillez de ‘Love me in whatever way’ en la que enamora prácticamente sólo con su voz. En la citada ‘Timeless’ o en ‘Waves know shores’ enamoraría a cualquier seguidor de Antony & The Johnsons. ‘F.O.R.E.V.E.R.’ es realmente para siempre y de nuevo acompañado básicamente por el piano canta a medio camino entre Stevie Wonder y Bill Withers con autética pasión. Porque al final este genio del post-dubstep y la electrónica lo que hace es ‘Modern soul’, sí, como el título de otro de los fascinantes singles de este disco. Algo que también tenemos en el fantástico tema titular, otra dinámica perla que parece desnuda pero en la que se perciben mil y un pequeños detalles. Cierra cantando prácticamente a capella y haciéndonos ver que se va la electricidad en una bella y emocionante ‘Meet you in the maze’. ¡Yo prefiero encontrarle en su actual gira en la que está agotando localidades donde quiera que va! ¡Genio absoluto y disco sublime y denso!
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