Texto: Txema Mañeru.
¡Nuevo gran descubrimiento en la aldea global del sello Dead Oceans! La verdad es que tenemos especial simpatía por esta casa discográfica que distribuye la gente de Everlasting / Popstock. No es tan “grande” o importante como Sub Pop, XL Recordings, Matador o 4 AD, pero tiene unos cuantos artistas que nos llaman poderosamente la atención comenzando por el grandísimo sueco The Tallest Man On Earth, pero siguiendo por John Vanderslice, Phosphorescent, A Place To Bury Strangers, Nurses, The Luyas y muchos más de los que puedes conocer más en www.deadoceans.com y www.everlastingrecords.com.
Pues bien ahora se han ido hasta Nueva Zelanda para descubrir a Marlon Williams. ¡Un cantautor de claros aires country y folk americanos! Su ascensión está siendo meteórica pues acaba de cumplir 25 años pero ha ganado ya un montón de premios de renombre en su país y Australia por su música claramente americana. Ha estado en grupos conocidos allí como Yarra Benders y, sobre todo, The Unfaithful Ways. También ha tenido un popular dúo con Delaney Davidson y ha girado con éxito junto a Band Of Horses, Cory Chisel o Justin Townes Earle. En sus inicios también se inspiró en otro apellido ilustre de estas músicas e hizo un disco con canciones de Townes Van Zandt y co Delaney Davidson lleva ya varios volúmenes exitosos titulados “The Secret History of Country Music Songwriting”.
Pero este disco se puede decir que es su auténtico debut en solitario y es una auténtica gozada de principio a fin. Pero si hay un tema que realmente me ha emocionado es el extenso y sobrecogedor ‘When I was a young girl’. Folk íntimo con guitarra de palo y con su voz llegando a registros casi propios del doo woop que completan 6 sublimes minutos. No le va a la zaga la magnífica y triste despedida con ‘Everyone’s got something to say’, aunque aquí ya entran otros instrumentos y, sobre todo, unos excelsos y celestiales coros. Pero antes de eso hay mucho más. Ese inicio de puro country con ‘Hello miss lonesome’ o las guitarras rockeras para conducir de ‘After all’, pero con voces folk y guapos coros. También el sonido para un western alucinado al estilo Tarantino, pero con cuerdas que es ‘I’m lost without you’ o el folk puro con su destacada voz de ‘Lonely side of her’. Se acerca con su voz hasta a Donovan en ‘Silent passage’ pero añadiendo una pedal steel sensacional y un buen violín de puro bluegrass. ¡Estará en mi lista de los mejores del año fijo y ya lo he puesto en mi altar junto a su compañero de escudería, The Tallest Man On Earth!
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