Texto: Txema Mañeru.
El sello francés Naïve cuenta con una destacada lista de artistas que van de una clásica como Marianne Faithfull (con estupendo y calentito “Give My Love To London”) a propuestas más actuales como Asa o M83. Tienes mucha más información en www.naive.es. Pero también tienen sellos con música más arriesgada minoritaria como No Format. En este sello acaban de aparecer el último disco del brasileño Lucas Santtana y al primera y esperada colaboración de Piers Faccini & Vincent Segal. Comenzamos por el Beck carioca.
Lucas Santtana: “Sobre Noites E Dias”
La verdad es que no había escuchado detenidamente a este compositor, guitarrista y cantante brasileño hasta su reciente y quinto trabajo, “O Deus Que Devasta Mas Tambén Cura”. Ahí se apreciaban sus raíces en la bossa nova y en la samba, pero mezclados con el más arriesgado sonido tropicalista. Todo ello sin dejar de lado el funk colorista y el rock independiente más colorista con referentes que van de Radiohead a Caetano Veloso, de Arto Lindsay a The Flaming Lips o de John Zorn a Tim Maia. Suena pues muy urbano y post tropicalista utilizando muchas percusiones, funk para bailar, algo de dub y poniendo en primer plano, a veces, su voz y su guitarra. Vamos que ha hecho un compendio de toda su trayectoria con momentos nostálgicos como ‘Montanha Russa Sentimental’ o la preciosa ‘Human time’, ésta última junto a Fanny Ardant y con una hermosa majestuosidad. En ‘Partículas de amor’ le ayuda Gui Amabis en la composición y en ‘Diary of a bike’, Féfé, que también pone su voz de rapero gabacho y con la adición de percusiones y guitarras africanas. En ‘Mariazinha Morena Clara’ nos invita al baile con sonidos del Brasil más actual y ‘Funk dos bromanticos’ va por dónde dice su título, aunque la electrónica le acercan al Beck de “Odelay” y además sorprenden unos aromas orientales. El lado más íntimo de Lucas surge en ‘Alguém assopra ela’ y en ‘Blind date’, una pieza muy hermosa con arreglos electrónicos y de cuerdas con destellos de Brian Eno, pero también con la sutilidad que ofrecen sus compañeros de sello de los que hablaremos a continuación. Sorprende también la despedida con ‘Velhinho’, una preciosidad de aires blues brasileños entre Caetano Veloso y Eric Clapton o JJ Cale, por las estupendas guitarras. No conozco todos sus discos, pero este es el que más me gusta entre los que he escuchado.
Piers Faccini & Vincent Segal: “Songs Of Time Lost”
Estos dos inclasificables músicos se conocieron en París hace más de un cuarto de siglo. Desde entonces han colaborado y actuado juntos pero todavía no habían grabado un disco juntos fruto de esta amistad y de semejantes inquietudes musicales. Ahora ha llegado ese momento y para ello han compuesto nuevos temas para la ocasión, pero también han llevado algunas versiones a su terreno y han adaptado algunas canciones tradicionales. Sólo necesitan voz, guitarra y chelo para crear un disco que puede encantar a seguidores de Antony & The Johnsons, Paul Roland o Perfume Genius. Comienza con ‘Jesce Sole’, una solemne preciosidad. Temas como ‘The closing of our eyes’ o ‘Quicksilver daydreams of Maria’ pueden gustar a seguidores de clásicos acústicos americanos como Don McLean, Randy Newman o James Taylor. El primero es de una banda sonora antigua de Piers y la segunda es una versión de Townes Van Zandt. Suenan sensuales y tiernos en portugués en ‘Cammina cammina’, de Pino Daniele y enamoran con un precioso instrumental dirigido por el chelo como ‘Wenn ich mir was wuenschen duerfte’, compuesto por Fiedrich Holländer. En ‘Villanella di Cenerentola’, no sé si por el idioma, pero me traen a la mente al más melódico Angelo Branduardi, aunque también tiene algo de los experimentos de Paul Roland. Otro nombre que tenía que surgir con este tipo de música camerística es el del ex Velvet Underground, John Cale. Temas como ‘A half of me’ (de nuevo de una banda sonora de Piers) y otros momentos cautivarán a quienes aman discos del galés como “Paris 1919”. Para el final se guardan el tema tradicional ‘Make me a pallet on your floor’ que popularizó Mississippi John Hurt ¡Música elegante, preciosista, variada y sin fronteras!
El sello francés Naïve cuenta con una destacada lista de artistas que van de una clásica como Marianne Faithfull (con estupendo y calentito “Give My Love To London”) a propuestas más actuales como Asa o M83. Tienes mucha más información en www.naive.es. Pero también tienen sellos con música más arriesgada minoritaria como No Format. En este sello acaban de aparecer el último disco del brasileño Lucas Santtana y al primera y esperada colaboración de Piers Faccini & Vincent Segal. Comenzamos por el Beck carioca.
Lucas Santtana: “Sobre Noites E Dias”
La verdad es que no había escuchado detenidamente a este compositor, guitarrista y cantante brasileño hasta su reciente y quinto trabajo, “O Deus Que Devasta Mas Tambén Cura”. Ahí se apreciaban sus raíces en la bossa nova y en la samba, pero mezclados con el más arriesgado sonido tropicalista. Todo ello sin dejar de lado el funk colorista y el rock independiente más colorista con referentes que van de Radiohead a Caetano Veloso, de Arto Lindsay a The Flaming Lips o de John Zorn a Tim Maia. Suena pues muy urbano y post tropicalista utilizando muchas percusiones, funk para bailar, algo de dub y poniendo en primer plano, a veces, su voz y su guitarra. Vamos que ha hecho un compendio de toda su trayectoria con momentos nostálgicos como ‘Montanha Russa Sentimental’ o la preciosa ‘Human time’, ésta última junto a Fanny Ardant y con una hermosa majestuosidad. En ‘Partículas de amor’ le ayuda Gui Amabis en la composición y en ‘Diary of a bike’, Féfé, que también pone su voz de rapero gabacho y con la adición de percusiones y guitarras africanas. En ‘Mariazinha Morena Clara’ nos invita al baile con sonidos del Brasil más actual y ‘Funk dos bromanticos’ va por dónde dice su título, aunque la electrónica le acercan al Beck de “Odelay” y además sorprenden unos aromas orientales. El lado más íntimo de Lucas surge en ‘Alguém assopra ela’ y en ‘Blind date’, una pieza muy hermosa con arreglos electrónicos y de cuerdas con destellos de Brian Eno, pero también con la sutilidad que ofrecen sus compañeros de sello de los que hablaremos a continuación. Sorprende también la despedida con ‘Velhinho’, una preciosidad de aires blues brasileños entre Caetano Veloso y Eric Clapton o JJ Cale, por las estupendas guitarras. No conozco todos sus discos, pero este es el que más me gusta entre los que he escuchado.
Piers Faccini & Vincent Segal: “Songs Of Time Lost”
Estos dos inclasificables músicos se conocieron en París hace más de un cuarto de siglo. Desde entonces han colaborado y actuado juntos pero todavía no habían grabado un disco juntos fruto de esta amistad y de semejantes inquietudes musicales. Ahora ha llegado ese momento y para ello han compuesto nuevos temas para la ocasión, pero también han llevado algunas versiones a su terreno y han adaptado algunas canciones tradicionales. Sólo necesitan voz, guitarra y chelo para crear un disco que puede encantar a seguidores de Antony & The Johnsons, Paul Roland o Perfume Genius. Comienza con ‘Jesce Sole’, una solemne preciosidad. Temas como ‘The closing of our eyes’ o ‘Quicksilver daydreams of Maria’ pueden gustar a seguidores de clásicos acústicos americanos como Don McLean, Randy Newman o James Taylor. El primero es de una banda sonora antigua de Piers y la segunda es una versión de Townes Van Zandt. Suenan sensuales y tiernos en portugués en ‘Cammina cammina’, de Pino Daniele y enamoran con un precioso instrumental dirigido por el chelo como ‘Wenn ich mir was wuenschen duerfte’, compuesto por Fiedrich Holländer. En ‘Villanella di Cenerentola’, no sé si por el idioma, pero me traen a la mente al más melódico Angelo Branduardi, aunque también tiene algo de los experimentos de Paul Roland. Otro nombre que tenía que surgir con este tipo de música camerística es el del ex Velvet Underground, John Cale. Temas como ‘A half of me’ (de nuevo de una banda sonora de Piers) y otros momentos cautivarán a quienes aman discos del galés como “Paris 1919”. Para el final se guardan el tema tradicional ‘Make me a pallet on your floor’ que popularizó Mississippi John Hurt ¡Música elegante, preciosista, variada y sin fronteras!
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