Álex O'Dogherty: “cada estado de ánimo tiene ritmo”



Texto: Carlos Molina.

Todo un artista. El simpático Álex O'Dogherty junto a la banda La Bizarrería se ha currado un disco, y DVD en directo, de factura y resultados notables: “Mi imaginación y yo”. Mucha imaginación, mucho humor y muchos sonidos al servicio de un proyecto que, ojalá, acerque próximamente a Bilbao.

Artista todoterreno y multidisciplinar. Creo que es una definición que te casa mucho mejor que la de ese “Imbécil” que aparece en la divertida intro coral a lo Golden Apple Quartet que presenta el álbum. Tu faceta musical era desconocida para mí. ¿Cuándo comenzaste a coquetear con la música, y qué es lo que más te atrae de este arte?


Empecé a estudiar solfeo y piano a los nueve años. La música siempre me ha acompañado.

Si te diera cinco segundos para pensar, esto es, poco tiempo, ¿qué cinco álbunes de los primeros que te vienen a la cabeza destacarías como imprescindibles en tu discoteca personal?

Me quedaría con “Twentysomething” (Jamie Cullum), “Wandering Spirit” (Mick Jagger), “Sabor Salado” (Los Ronaldos), “Travelling without moving” (Jamiroquai) y “Live in Volvo” (Vinicio Caposella).

Hilando con esta pregunta, ¿qué cinco artistas y/o bandas musicales son los que más admiras?

Aparte de los cinco anteriores, por ejemplo, Sting, Lenny Kravitz, Paolo Conte, Red Hot Chili Peppers, Serrat…

“Imbécil”, y su cálido acompañamiento jazzístico, es una magnífica presentación a este trabajo de estructura de espectáculo, como denotan sus presentaciones entre tema y tema. “Imbécil”, que no dócil. Y osado, diría yo, como para apostar por un lanzamiento musical de este calibre, CD y DVD, casi nada… ¿Cuándo comenzaste a pensar en este extenso trabajo (13 canciones con sus 13 presentaciones), y cuánto tiempo te ha llevado su preparación antes de entrar al estudio de grabación?

En realidad, no lo pensé mucho. Todo fue muy rápido. Montar el espectáculo, grabar el disco… Digamos que la preparación del disco fueron los 20 conciertos previos y lo que fue surgiendo en el estudio.




Hablaba antes del lanzamiento de “Mi imaginación y yo” como CD acompañado de un DVD que recoge un concierto grabado para Paramount Comedy. El álbum se disfruta mucho, pero el DVD también… ¿consideras que si no se escucha el álbum y se ve también el DVD con el directo del disco, el goce de este trabajo no es tan amplio, o crees que se puede disfrutar por igual escuchando solo el CD o viendo únicamente el DVD?


Yo ofrezco todas esas posibilidades para que la gente tenga donde elegir, para que sienta que su dinero está bien empleado. El CD y el DVD son dos experiencias diferentes. Complementarias, pero diferentes. Mejor si lo escuchan y lo ven, claro.

“Cuatro minutos” es uno de mis cortes favoritos del disco, con un agradecido ambiente luminoso, que lleva a “Esta canción es una mierda”. Tal cual. Curioso título para uno de los temas más divertidos del álbum, con un pegadizo aire swing… como su estribillo. También es ejemplo de la variedad sonora que hay en el álbum y de la pedazo banda que te acompaña. Preséntanosla, si te parece, para poder piropearles a gusto si es que te acercas a Bilbao algún día con este trabajo, aunque luego hablaremos de ello…

Pues todo partió de Miguel Marcos, el guitarra. Era mi profesor en un curso de armonía. Escuchó mis canciones, le gustaron y me animó a montarlas. El reclutó al resto que son: Alberto Torres al teclado, Richard Libeton en la batería, Pepe Curioni al bajo y nuestro técnico Giuseppe di Gloria. Esa es La Bizarrería.

Un amplio abanico sonoro en el que imagino que también habrá tenido mucho que ver el productor Fernando Vacas (Conchita, Prin La Lá, María de Medeiros). ¿Cómo ha sido el trabajo con él, y qué crees que ha terminado por aportar a “Mi imaginación y yo”?


Fernando se ha convertido en un amigo y en mi mejor consejero dentro de este mundo. Durante la grabación nos acogió a todos en su casa de Córdoba y nos hizo sentir como en la nuestra. Ese ambiente que creó tan buen rollero se acabó reflejando en el disco. Además de tener mucho criterio para opinar sin imponer, y estar siempre ahí cuando lo necesitara. Ha sido imprescindible.

“Una canción muy bonita” con su aire acústico y fronterizo sigue manteniendo el tono elevado… y humorístico. Seguro que es de las más celebradas en los shows. Hablando de shows, ¿tienes la idea, y el tiempo, vaya, de llevar este disco/proyecto a distintas salas del país aparte de su presentación en Madrid?

De momento vamos a estar unos meses todos los viernes en el Teatro de La Latina de Madrid, ya que me encuentro secuestrado en The Hole 2. A lo mejor para primavera me escapo y hacemos una gira. Ya la estamos planeando, y ojalá que nos quieran por Bilbao, que yo amo al Pais Vasco, en general. Es posiblemente de los sitios donde más he actuado y mejor me han tratado.

En la aflamencada “Mi energía es mía” te acompañas de Tote King. “Mil Cepillos de Dientes”, con su cruce a lo BSO de “Amelie” y una balada desgarrada, y la también recogida (el tema lo merece)“No hubo manera”, con el gran Mastretta al clarinete, nos lleva al ecuador del álbum. Ya hemos hablado de Tote King, y ahora nos hemos referido a Mastretta. Junto a Kiko Veneno, que aparece en la sentida “Niña de Chocolate”, conforman el trío de lujo de colaboradores. ¿Cómo contactaste con ellos, y qué crees que han terminado por aportar a cada una de las canciones?

A todos los admiro muchísimo y tenía muchas ganas de hacer algo con ellos. Como no tenía nada que perder, los llamé y tuve la suerte de que aceptaran. Cada uno le ha dado un punto muy especial al disco. Es una suerte.

“Besos de esos” coquetea con aires arábigos, el rap y el rock, mientras que gran parte de “Venveteven” sigue la senda recogida de “No hubo manera” para finalizar en un vertiginoso final. Nuevas muestras del eclecticismos sonoro que esconde este “Mi imaginación y yo”. ¿Este eclecticismo es muestra también de tu amplitud de miras musicales como oyente?

Sin duda. Me gusta de todo, y además son canciones hechas durante muchos años y con diferentes estados de ánimo. Cada estado tiene ritmo. Sólo hay que dejarse llevar. Yo también cuento historias, y cada historia tiene su ambiente.

Me encanta el Groove de “Yo y mi imaginación”, sin duda uno de los cortes del disco, que da paso a una intimista “La vuelta al mundo”. El cierre con “Pizza Margarita” mantiene la nota final en un notable alto. ¿Te planteas sumergirte más pronto que tarde en un nuevo proyecto musical como éste, o prefieres ir paso a paso, o mejor dicho, proyecto a proyecto?

Yo tengo miles de proyectos en la cabeza, y nunca los hago en el orden que me imagino. Aunque se me han quedado muchas canciones fuera que me gustan y está claro que tarde o temprano haré, al menos, otro disco.

Comentarios