Bob Dylan en Bilbao (por Txema Mañeru)

No es nada exagerado llamar a alguien como BOB DYLAN maestro. Lo es, aunque algunos no quieran darse cuenta. Su trayectoria es prácticamente intachable y con sus 71 años de edad sigue inmerso en The Never Ending Tour, la gira interminable que le lleva por los escenarios de todo el mundo con más de 100 fechas anuales durante ya más de 20 años. Empezó allá por el 88 y en 2007 cumplió la cifra de los 2000 conciertos realizados. Parece ser que, a pesar de sus "fluctuaciones" espirituales, "alguien" le ha encomendado la misión de extender su inabarcable y sensacional obra al mayor número posible de fieles.

Y eso a pesar de estar inmerso en los últimos detalles para un inminente nuevo disco de estudio (el número 35 de su discografía, excluyendo los incontables recopilatorios y directos, y. tasando por lo bajo, más de media docena de ellos imprescindibles) que suceda al jugoso "TOGETHER THROUGH LIFE" (Sony). En él colaborarán, entre muchos otros, David Hidalgo de Los Lobos (con su acordeón y el tres cubano) y se espera tenga influencias de la música latinoamericana (aunque con Dylan todo puede cambiar en cualquier momento).

Recientemente se han cumplido 50 años desde su debut con "Bob Dylan". Luego irían cayendo discos imprescindibles en la historia como "The Freewhelin'", "Highway 61 Revisited", "Blonde On Blonde", "Blood On the Tracks" o "Time Out Of Mind". Trabajos que le han llevado a ganar varios Grammys, Globos de Oro y hasta un Oscar. También es miembro de todos los Hall Of Fame más importantes, Caballero de la Orden en Francia y Príncipe Asturias en España. Cualquier año de estos recibirá su tantas veces pospuesto (y merecido) Premio Nobel de Literatura.

En los últimos tiempos se suele parapetar tras su piano y utiliza en contadas ocasiones su diestra guitarra eléctrica, pero siempre viene acompañado de una banda eléctrica de categoría. En las guitarras están los expertos Stu Kimball y Charlie Sexton, mientras que la sección de ritmo la componen su veterano compañero Tony Garnier al magistral bajo y contrabajo y George Recelli a la batería. Su repertorio es impredecible y variado de unos conciertos a otros. También lo es la forma de afrontar sus clásicos. Esto hace que cada uno de sus conciertos sea toda una experiencia para sus seguidores de años y que, a veces, no apasione tanto a los seguidores ocasionales o que esperan oír sus más típicas canciones de la forma original como las concibió.

Recientemente se ha publicado también "CHIMES OF FREEDOM. THE SONG OF BOB DYLAN" (Fontana / Universal) un cuádruple compacto que conmemora sus 50 años en la música y los 50 de Amnistía Internacional y que tiene versiones a cargo de 75 artistas tan importantes como los de Johnny Cash, Steve Earle, Elvis Costello, Jackson Browne, Pete Townshend, Lucinda Williams, por poner algunos ejemplos.

En Bilbao tocará en la explanada del Guggenheim para conmemorar el 15 Aniversario del Museo. Lo hará, como primera fecha en España, el 11 de julio, sirviendo así de excelente aperitivo al actual BBK LIVE (The Cure, Radiohead, Bloc Party, Snow Patrol). Los agraciados en verle serán unos 5000 con entradas generales a 45 euros y 500 limitadas de asiento a 85. Además será la única actuación en esta gira con él y su banda en solitario (suelen acercarse a las dos horas de concierto) ya que las otras dos serán en el FIB de Benicàssim y en el de Cap-Roig en Calella de Palafrugell con los correspondientes inconvenientes de estos grandes eventos. Tienes toda la información y la forma de conseguir entradas para Bilbao en www.ltinews.net y en www.livenation.es. ¡Excelente oportunidad por tanto para ver al artista más influyente de la música moderna de todos los tiempos! Ya sabes eso de que él añadió el cerebro al rock'n'roll. Y sí, Dylan no es Dios como lo fue Eric Clapton (al menos el Dios de la guitarra), pero como canta Iñigo Coppel en "El mayor fan de Bob Dylan del mundo", con un poco de cachondeo (pero con su parte de verdad), "Dylan solo es el representante de Dios en la tierra...". Lo mejor de todo es que no sabrás la lista de canciones que interpreta hasta el momento del concierto porque trabaja con una lista amplísima (no como otros grandes que tienen todo milimetrado), que varía muchísimo de un día al otro, como también varía la forma de afrontar sus legendarios temas. ¡Genio y figura!

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