GOSE es una banda de Arraste que tras deslumbrar con un primer largo que enlazaba rock, pop, algunas que otra programación y trikitixa, se fue de gira con Carlinhos Brown para demostrar que, ojo, si el disco era buena, el directo lo era aún más. Su segundo LP incide en el sonido original y atractivo, y debería llevarles todavía más alto.Tengo que ser sincero y humilde y reconocer que me habéis dado un buen bofetón sonoro en la cara. Tenía mis dudas de lo que una propuesta como la vuestra podía dar de sí (ese cruce entre el folk y la electrónica, con pinceladas rock y pop), pero ya sois uno de los grupos que forman parte de mi MP4 y me hacen más gratas las (varias) horas de viaje al trabajo. ¿Cómo surge Gose y cómo se produce esta apuesta sonora tan arriesgada y, a la vez, atractiva?
Gose nace, crece y se reproduce en Arrasate. Se trata de una vieja idea que rondaba por nuestras cabezas desde hace muchos años pero que, al estar metidos en otras historias, nunca encontramos el momento para darle forma. Hasta que un buen día coincidimos y arrancamos. Dos años, más de cincuenta conciertos y un montón de horas después tenemos nuestro segundo disco. Quién nos lo iba a decir... Creo que ése era el momento justo y el sitio adecuado para juntarnos el hambre (gose) con las ganas de comer. Nuestra idea era juntar lo que cada uno por separado sabía hacer, por un lado secuencias y muestras y por otro lado Ines, que toca la trikitixa pero no quería ser trikitilari. Nos gustaba la idea de poder sacar la triki (como instrumento) de las plazas, romerías, etcétera… y poder llevarla al club.
No tuve la suerte de poder acercarme a vuestro primer disco (error que pienso subsanar pronto). ¿Qué me podríais contar de él?
Contar algo de un disco es bastante difícil, lo mejor suele ser escucharlo y cada uno sacar sus propias conclusiones. Para nosotros siempre será el disco más importante de todos, pues fue con el que empezamos a andar y por el que hemos conseguido sacar este segundo álbum, además de haber tocado en un montón de conciertos.
Han transcurrido dos años entre ese disco debut y este nuevo álbum, de majestuosa portada blanca. Un par de años con mucho trabajo (gira con Carlinhos Brown, banda sonora de Eutsi!). Adiós a vuestra idea de preparar con calma el álbum. De todos modos, si ha habéis sentido en algún momento presión o tensión, a la hora de presentar los discos la habéis escondido muy bien, porque suenan frescos, directos y, en su mayoría, bailables y festivos.
Han sido dos años muy intensos, con un montón de cosas que jamás hubiéramos imaginado que nos pudieran ocurrir con Gose. Sarna con gusto no pica, así que estamos encantados y no hemos sufrido ningún tipo de agobio ni nada por el estilo. Las cosas van viniendo y las vamos haciendo a nuestra bola, sin dejarnos presionar demasiado. Tenemos muy claro cada pasito que damos, y mejor dar pocos pasitos pero bien dados que muchos pero a trompicones.
Es difícil no hacer referencia a la facilidad con la que vuestras letras reflejan el sexo. Si ya de por sí es complicado hacer una letra, ¿cómo afrontáis la desnudez y concisión con la que os sumergís en este aspecto?
El sexo es un tema muy habitual en nuestras conversaciones, así que lo más normal es reflejarlo en nuestras letras. Si nos gustará el fútbol y habláramos de fútbol, muchas de nuestras letras hablarían de fútbol, pero no es así. Hablamos de sexo y cantamos sobre sexo.
Gose nace, crece y se reproduce en Arrasate. Se trata de una vieja idea que rondaba por nuestras cabezas desde hace muchos años pero que, al estar metidos en otras historias, nunca encontramos el momento para darle forma. Hasta que un buen día coincidimos y arrancamos. Dos años, más de cincuenta conciertos y un montón de horas después tenemos nuestro segundo disco. Quién nos lo iba a decir... Creo que ése era el momento justo y el sitio adecuado para juntarnos el hambre (gose) con las ganas de comer. Nuestra idea era juntar lo que cada uno por separado sabía hacer, por un lado secuencias y muestras y por otro lado Ines, que toca la trikitixa pero no quería ser trikitilari. Nos gustaba la idea de poder sacar la triki (como instrumento) de las plazas, romerías, etcétera… y poder llevarla al club.
No tuve la suerte de poder acercarme a vuestro primer disco (error que pienso subsanar pronto). ¿Qué me podríais contar de él?
Contar algo de un disco es bastante difícil, lo mejor suele ser escucharlo y cada uno sacar sus propias conclusiones. Para nosotros siempre será el disco más importante de todos, pues fue con el que empezamos a andar y por el que hemos conseguido sacar este segundo álbum, además de haber tocado en un montón de conciertos.
Han transcurrido dos años entre ese disco debut y este nuevo álbum, de majestuosa portada blanca. Un par de años con mucho trabajo (gira con Carlinhos Brown, banda sonora de Eutsi!). Adiós a vuestra idea de preparar con calma el álbum. De todos modos, si ha habéis sentido en algún momento presión o tensión, a la hora de presentar los discos la habéis escondido muy bien, porque suenan frescos, directos y, en su mayoría, bailables y festivos.
Han sido dos años muy intensos, con un montón de cosas que jamás hubiéramos imaginado que nos pudieran ocurrir con Gose. Sarna con gusto no pica, así que estamos encantados y no hemos sufrido ningún tipo de agobio ni nada por el estilo. Las cosas van viniendo y las vamos haciendo a nuestra bola, sin dejarnos presionar demasiado. Tenemos muy claro cada pasito que damos, y mejor dar pocos pasitos pero bien dados que muchos pero a trompicones.
Es difícil no hacer referencia a la facilidad con la que vuestras letras reflejan el sexo. Si ya de por sí es complicado hacer una letra, ¿cómo afrontáis la desnudez y concisión con la que os sumergís en este aspecto?
El sexo es un tema muy habitual en nuestras conversaciones, así que lo más normal es reflejarlo en nuestras letras. Si nos gustará el fútbol y habláramos de fútbol, muchas de nuestras letras hablarían de fútbol, pero no es así. Hablamos de sexo y cantamos sobre sexo.
Aunque, como ya he apuntado, hay una fuerte carga sexual en los temas, no dejáis de acercaros a otros aspectos sociales. Comentabais en la presentación del disco que en estos dos años las noticias han cambiado y, por eso, vuestras letras también. ¿Afrontáis el día a día que vivimos ahora mismo con pesimismo, escepticismo u optimismo?
Aún quedan muchas cosas por solucionar, y hay demasiada gente que por razones diversas, normalmente por dinero, no les interesa que se solucionen, así que la cosa sigue igual. Los que mandan siguen siendo los mismos, y el resto a sobrevivir, buscándonos la vida y sin hacer demasiado ruido para no molestar.
Aún quedan muchas cosas por solucionar, y hay demasiada gente que por razones diversas, normalmente por dinero, no les interesa que se solucionen, así que la cosa sigue igual. Los que mandan siguen siendo los mismos, y el resto a sobrevivir, buscándonos la vida y sin hacer demasiado ruido para no molestar.
En el disco se incluye el tema “Hil ezazu aita”, de Hertzainak. ¿Cómo afrontasteis el reto de acercaros a una pieza de una de las bandas más destacadas que ha dado el rockero vasco?
Alguno de nosotros vivió muy de cerca aquel momento y creemos que todavía hoy tenemos mucho que aprender de aquellas bandas. Salía todo del corazón y tenían una razón muy importante para estar ahí, un mensaje que comunicar, no importaba la marca de guitarra, o el equipo de sonido. Tenían actitud, y es algo que echamos de menos.
Alguno de nosotros vivió muy de cerca aquel momento y creemos que todavía hoy tenemos mucho que aprender de aquellas bandas. Salía todo del corazón y tenían una razón muy importante para estar ahí, un mensaje que comunicar, no importaba la marca de guitarra, o el equipo de sonido. Tenían actitud, y es algo que echamos de menos.
Pasáis de Oihuka a Baga-Biga, sello que últimamente no para de presentar novedades. Un cambio, sin embargo, no excesivamente radical porque seguís contando con el apoyo del sin par Ritxi Aizpuru. ¿Cómo surge este cambio de sello y qué tal os está yendo con el sello de Mungia?
Para nosotros el “sello o discográfica” es la persona que nos coge el teléfono, con la que hablamos de las próximas canciones y nos vamos de cena o a ver conciertos, e incluso aquella que algunas veces viene a vernos, y no por negocio, sino porque le gusta el grupo. ¡Impresionante! Creemos más en las personas que en el nombre de las empresas. Ni todas las independientes son unas enrolladas ni todas las multis son unas ladronas. Ambas tienen el mismo fin, vender. Por lo tanto, para nosotros no ha cambiado nada. Aunque ahora el logo sea distinto o incluso presentemos el disco en Bilbo, seguimos hablando todos los días con el mismo disquero. Puedes empezar a imaginarte todo lo que nos prometió en su día. Cuando dijimos que seríamos leales no quisimos decir que seríamos fieles.
Para nosotros el “sello o discográfica” es la persona que nos coge el teléfono, con la que hablamos de las próximas canciones y nos vamos de cena o a ver conciertos, e incluso aquella que algunas veces viene a vernos, y no por negocio, sino porque le gusta el grupo. ¡Impresionante! Creemos más en las personas que en el nombre de las empresas. Ni todas las independientes son unas enrolladas ni todas las multis son unas ladronas. Ambas tienen el mismo fin, vender. Por lo tanto, para nosotros no ha cambiado nada. Aunque ahora el logo sea distinto o incluso presentemos el disco en Bilbo, seguimos hablando todos los días con el mismo disquero. Puedes empezar a imaginarte todo lo que nos prometió en su día. Cuando dijimos que seríamos leales no quisimos decir que seríamos fieles.
Lo que está claro es que el que quiera presenciar vuestro directo no va a tener excusas, al menos en Euskadi, porque he visto una decena de fechas cerradas hasta principios de febrero. ¿Tenéis pensado actuar fuera del País Vasco, cosa que ya habéis hecho, y mucho, en estos dos últimos años?
Eso es lo que mas nos ha sorprendido de todo, la cantidad de conciertos que hemos hecho. Y tocar en directo es lo que realmente nos gusta, donde realmente disfrutamos. Por la misma razón que te comentaba antes de Hertzainak, lo que nos gusta es tocar, ya sea para 5 o para 1000 personas.
Eso es lo que mas nos ha sorprendido de todo, la cantidad de conciertos que hemos hecho. Y tocar en directo es lo que realmente nos gusta, donde realmente disfrutamos. Por la misma razón que te comentaba antes de Hertzainak, lo que nos gusta es tocar, ya sea para 5 o para 1000 personas.
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