Texto: José Manuel Valiño.
Pasan los años, los conciertos, los discos publicados, pero ahí sigue el mítico rockero Glenn Hughes. El músico británico parece haber bebido de la pócima de la eterna juventud, física y musical, para continuar en la brecha después de cuatro décadas de intensa actividad.
Su visita a Bilbao con motivo del primer aniversario Metal Fever es un favor de los dioses musicales que han tenido a bien bendecir a la ciudad con la presencia del que fuera bajista y cantante de Deep Purple; intervino con esta banda en álbumes tan importantes como “Burn”, “Stormbringer” y “Come Taste The Band”.
La Voz del Rock comenzó una carrera en solitario donde demostró su enorme talento para la composición y donde ha dejado para la posteridad grabaciones como “Soul Mover”, “Fused” (junto a Tony Iommi) y “Music For The Divine”.
En esta visita a la ciudad, Glenn Hughes estará acompañado por su banda, con la que realizará un extenso recorrido por su amplia y variada trayectoria profesional. Incluirá temas de su paso por Trapeze, Deep Purple, Black Country Communion o California Breed, proyecto compartido con Jason Bonham y el joven Andrew Watt, y canciones de su propio repertorio.
Para calentar el ambiente previo al concierto, abrirá el guitarrista y cantante Jared James Nichols, una de las grandes revelaciones actuales del blues rock. Ocasión que aprovechará el músico estadounidense para presentar su primer álbum, “Old Glory & The Wild Revival”.
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